Título Original: STAR WARS: THE CLONE WARS
País: Estados Unidos, Singapur
Año: 2008
Duración: 98 min.
Género: Animación
Guión: Henry Gilroy, Steven Melching, Scott Murphy
Distribuidora: Warner Bros. Pictures
Productora: Lucasfilm
Dirección artística: Steward Lee
Montaje: Jason Tucker
Música: Kevin Kiner
Productor: Catherine Winder, George Lucas
Productor asociado: Sarah Wall
Productor ejecutivo: George Lucas
Voz original: Anthony Daniels, Ashley Eckstein, Catherine Taber, Christopher Lee, Dee Bradley Baker, Ian Abercrombie, James Arnold Taylor, Matt Lanter, Matthew Wood, Nika Futterman, Samuel L. Jackson, Tom Kane
«Una Galaxia dividida:Tras la Batalla de Geonosis, el Ejército Droide del Conde Dooku con un ataque fulminante se ha hecho con el control de las principales rutas hiperespaciales aislando a la República de la mayoría de su Ejército Clon. Con pocos clones disponibles, los Generales Jedi no pueden afianzarse en el Borde Exterior mientras más y más planetas se unen a los Separatistas de Dooku.Mientras los Jedi están ocupados librando una Guerra, nadie se encarga de mantener la Paz. El caos y el crimen se extienden, y los inocentes se convierten en víctimas en una Galaxia sin ley. El hijo del Señor del Crimen Jabba el hutt ha sido secuestrado por una banda rival de piratas. Desesperado por salvar a su hijo, Jabba lanza una llamada de auxilio. Llamada a la que los Jedi, responden con cautela...»
“¡¡¡Y murió la nostalgia!!!” La película de “Star Wars: Las guerras clon” así de claro lo deja y sirve de avanzadilla para una serie de televisión que George Lucas y su equipo ha previsto de más de cien capítulos (que por cierto, los primeros ya hemos podido ver por España y alguno de los ya vistos me parece magnífico). No entiendo muy bien el por qué de las críticas furibundas a las nuevas producciones acusándolas de traicionar el espíritu original de la saga (más bien parecen rabietas de nostálgicos y por eso he empezado como lo he hecho). Pues a mí no me parece tan grave. Las generaciones a las que apasiona la primera trilogía ya tuvieron lo suyo, pero los tiempos cambian y el cine y la televisión también y Lucas y su equipo (subrayo lo de “equipo” porque creo que no es todo responsabilidad de George Lucas y hay mucha gente detrás) han decidido seguir avanzando. Pues chapeau por él, creo que hubiera sido un error no hacerlo.
Pienso que la decisión definitiva tuvo lugar al acometer el Episodio II “El ataque de los clones” porque es cuando se observa una apuesta más decidida por el cambio y ahora me explico. Yo creo que la trilogía inicial surgió bajo unas condiciones radicalmente distintas sobre las que se podría hablar largo y tendido, que nada tienen que ver con las actuales. Resumamos el cambio diciendo que de haber estrenado entonces, allá por el año 1977 las películas que se hacen hoy (no sólo de Star wars sino cualquiera de acción) la gente se habría quedado sin habla (como no, los efectos han evolucionado muchísimo) pero se hubiera considerado “cine de evasión” con toda la carga negativa que entonces esa definición tenía. Es como si ese tipo de cine no fuera realmente importante y creo que deberíamos considerar que hasta hace no mucho era muy complicado que ganara un premio importante una película como “El señor de los anillos: el retorno del rey” aunque por suerte las cosas han cambiado radicalmente.
Hoy en día el cine se puebla de productos de evasión y entretenimiento y no sólo es comercialmente rentable hacerlo sino que es “digno” en parte gracias a lo que ya han hecho gente como Steven Spielberg, George Lucas, James Cameron y tantos otros. Ya no es necesario dar un trasfondo dramático, un tono de suspense o un aspecto realista a las historias, ahora basta y sobra con la mera diversión, la fantasía por sí, la acción y los efectos especiales. Un adulto no deja de serlo ya porque vaya a ver la última película de superhéroes. Hace unos tiempos eran “películas para niños”. Y menos mal que todo ha cambiado porque no dejaban de ser prejuicios.
Evidentemente los cambios traen cosas buenas y otras que no lo son tanto. Creo que los nostálgicos de Star Wars echan de menos la sensación de suspense que había tras el argumento de cada una de las tres películas originales, que se echa en falta una mayor sensación de “peligro” en cada escena y el dramatismo que se sentía en cada muerte o en cada acción de riesgo o el estremecimiento ante cada aparición de Darth Vader. Todo eso se ha perdido y en parte porque ya sabemos quién es quién y argumentalmente prácticamente está todo lo verdaderamente importante contado, pero también se ha perdido porque Lucas ha decidido no quedarse anclado y seguir hacia delante, asumir que Star wars “sólo” puede ser ya un producto de entretenimiento y tamizarlo como corresponde a los nuevos tiempos y las nuevas generaciones.
Particularmente y en contra de muchas opiniones a mí me parece un acierto y pienso que ni si quiera argumentalmente chirría porque a fin de cuentas se nos muestra un universo donde, a pesar del enfrentamiento de la República con los disidentes predomina una suerte de optimismo a veces confiado y algo prepotente de los jedis que en las Guerras Clon creen poder con una amenaza que es mucho más temible de lo que son capaces de ver y que supone finalmente su propia perdición. Es lo que ilustran el Episodio I, Episodio II y sobretodo ahora todas y cada una de las producciones que se está haciendo de las Guerras Clon. En concreto la película que nos ocupa nos muestra a unos Obin Wan y Anakin que se sienten muy superiores a las fuerzas que les amenazan y en cierto modo soberbios y socarrones hasta en los momentos más tensos de batalla. Incluso la aprendiz padawan Ashoka que se nos presenta peca de ello y el propio Yoda que pese a ser el jedi más sabio y poderoso comete el error de subestimar a sus rivales (por cierto que su “fracaso” pienso que fue lo más desaprovechado en el “Episodio III” porque era el asunto que podía haber dado argumentalmente mayor carga dramática).
Ahora ya hablando de esta película de “Las guerras clon” creo que es fiel a lo que pretendía Lucas a partir de ahora y se presenta como un entretenimiento, una película de animación, sí, pero ante todo una película de acción y aventuras aunque ambientada en el universo de Star Wars. No hay que buscar en ella mayor profundidad ni una carga dramática que no tiene (para desgracia de los nostálgicos y de muchos otros que buscan algo más en el cine sea del género que sea) y sí una película para entretenerse como también lo es la serie para la que sirve de preámbulo y que seguramente tendrá más tiempo para ahondar en aspectos más interesantes (he visto el primer capítulo y reafirma esta idea mía: magnífico el momento en que Yoda habla con los tres clones que conforman su guardia personal).
Indudablemente es una película que no pasa de la corrección, no es el cine con mayúsculas que sí nos ofrecían las primeras películas de la saga puesto que de alguna manera y en esto sí que estaremos de acuerdo muchos, el nivel ha ido bajando conforme los argumentos han ido perdiendo peso dramático y suspense y la acción ha pasado a ocupar la pista central de las historias, pero tampoco me parece una producción desdeñable como muchos han dicho porque creo que el toparse con algo que no esperaban y no querían les ha “encendido” más de la cuenta. A mí personalmente me chirría toda la parte que tiene que ver con los Hutt (especialmente “apestosito” que para mi gusto es un personaje más irritante que el propio Jar Jar Binks) y en mi apreciación le quita puntos a la película, pero por contra hay momentos realmente impactantes como las acciones de los jedis en batalla (por mucho que nunca me ha gustado demasiado que se hayan convertido en algo así como “superhéroes”) o el arranque con el ataque a los puestos de los cañones de la República. Me encanta casi siempre que salen los clones en acción y remitiría para ello a uno de los episodios de la primera serie de animación que se hizo en dibujo tradicional en el que era protagonista un grupo de élite y que me pareció grandioso (Por cierto y a modo de apunte decir que aquella serie es cronológicamente posterior a esta).
Tampoco me convence demasiado el tipo de animación usada y es uno de los aspectos que más se han criticado de esta producción puesto que se le acusa de falta de profundidad de campo y de que los personajes humanos no terminan de estar del todo conseguidos, pero la verdad es que no hay que buscarle un aspecto realista que nunca ha pretendido conseguir y en la serie de televisión eso no parece un problema. Quizás sea una animación que envejezca mal con el tiempo debido a los avances que se están logrando en este campo, pero sí es cierto que a cambio de las pegas permite que la acción sea trepidante.
En definitivas cuentas que ante lo que estamos es ante el prólogo de lo que muchos pidieron, al comprobar que sólo se aludía a su comienzo en Episodio II y a su final en Episodio III: Las Guerras Clon, desarrolladas por extenso en una serie de más de cien capítulos cuyo comienzo es esta película. Disgustará a los “nostálgicos” y apasionará a las nuevas generaciones, pero entrentendrá en ambos casos a quien se acerque a ella sin demasiados prejuicios y sin esperar algo que nunca prometió ser porque nunca pasó de ser una “película pequeña” dentro del universo de Star Wars. Ese puede que sea su mayor “pecado” aunque en lo que a mí respecta pienso que no por ello está por debajo de muchísimas películas que se hacen en la actualidad sin otro objetivo que entretener y sin mayor carga de profundidad. Si apoyamos al cine de fantasía y acción como una alternativa digna a otro tipo de cine pienso que esta película aunque esté por debajo de sí misma y de la saga a la que pertenece no está por debajo de muchas otras películas cuyo objetivo es el mismo, entretener y hacer caja. Eso sí, a todos nos hubiera gustado un poco más de enjundia argumental porque usar un rapto para conmover a los más pequeños con el “apestosito” no tiene que ser un problema para darle más emoción al relato sino al contrario. ¡¡¡Qué pena tanta contra para tan poco pro!!! Al menos la saga sigue viva para disfrute de muchos y disgusto de otros tantos.
“¡¡¡Y murió la nostalgia!!!” La película de “Star Wars: Las guerras clon” así de claro lo deja y sirve de avanzadilla para una serie de televisión que George Lucas y su equipo ha previsto de más de cien capítulos (que por cierto, los primeros ya hemos podido ver por España y alguno de los ya vistos me parece magnífico). No entiendo muy bien el por qué de las críticas furibundas a las nuevas producciones acusándolas de traicionar el espíritu original de la saga (más bien parecen rabietas de nostálgicos y por eso he empezado como lo he hecho). Pues a mí no me parece tan grave. Las generaciones a las que apasiona la primera trilogía ya tuvieron lo suyo, pero los tiempos cambian y el cine y la televisión también y Lucas y su equipo (subrayo lo de “equipo” porque creo que no es todo responsabilidad de George Lucas y hay mucha gente detrás) han decidido seguir avanzando. Pues chapeau por él, creo que hubiera sido un error no hacerlo.
Pienso que la decisión definitiva tuvo lugar al acometer el Episodio II “El ataque de los clones” porque es cuando se observa una apuesta más decidida por el cambio y ahora me explico. Yo creo que la trilogía inicial surgió bajo unas condiciones radicalmente distintas sobre las que se podría hablar largo y tendido, que nada tienen que ver con las actuales. Resumamos el cambio diciendo que de haber estrenado entonces, allá por el año 1977 las películas que se hacen hoy (no sólo de Star wars sino cualquiera de acción) la gente se habría quedado sin habla (como no, los efectos han evolucionado muchísimo) pero se hubiera considerado “cine de evasión” con toda la carga negativa que entonces esa definición tenía. Es como si ese tipo de cine no fuera realmente importante y creo que deberíamos considerar que hasta hace no mucho era muy complicado que ganara un premio importante una película como “El señor de los anillos: el retorno del rey” aunque por suerte las cosas han cambiado radicalmente.
Hoy en día el cine se puebla de productos de evasión y entretenimiento y no sólo es comercialmente rentable hacerlo sino que es “digno” en parte gracias a lo que ya han hecho gente como Steven Spielberg, George Lucas, James Cameron y tantos otros. Ya no es necesario dar un trasfondo dramático, un tono de suspense o un aspecto realista a las historias, ahora basta y sobra con la mera diversión, la fantasía por sí, la acción y los efectos especiales. Un adulto no deja de serlo ya porque vaya a ver la última película de superhéroes. Hace unos tiempos eran “películas para niños”. Y menos mal que todo ha cambiado porque no dejaban de ser prejuicios.
Evidentemente los cambios traen cosas buenas y otras que no lo son tanto. Creo que los nostálgicos de Star Wars echan de menos la sensación de suspense que había tras el argumento de cada una de las tres películas originales, que se echa en falta una mayor sensación de “peligro” en cada escena y el dramatismo que se sentía en cada muerte o en cada acción de riesgo o el estremecimiento ante cada aparición de Darth Vader. Todo eso se ha perdido y en parte porque ya sabemos quién es quién y argumentalmente prácticamente está todo lo verdaderamente importante contado, pero también se ha perdido porque Lucas ha decidido no quedarse anclado y seguir hacia delante, asumir que Star wars “sólo” puede ser ya un producto de entretenimiento y tamizarlo como corresponde a los nuevos tiempos y las nuevas generaciones.
Particularmente y en contra de muchas opiniones a mí me parece un acierto y pienso que ni si quiera argumentalmente chirría porque a fin de cuentas se nos muestra un universo donde, a pesar del enfrentamiento de la República con los disidentes predomina una suerte de optimismo a veces confiado y algo prepotente de los jedis que en las Guerras Clon creen poder con una amenaza que es mucho más temible de lo que son capaces de ver y que supone finalmente su propia perdición. Es lo que ilustran el Episodio I, Episodio II y sobretodo ahora todas y cada una de las producciones que se está haciendo de las Guerras Clon. En concreto la película que nos ocupa nos muestra a unos Obin Wan y Anakin que se sienten muy superiores a las fuerzas que les amenazan y en cierto modo soberbios y socarrones hasta en los momentos más tensos de batalla. Incluso la aprendiz padawan Ashoka que se nos presenta peca de ello y el propio Yoda que pese a ser el jedi más sabio y poderoso comete el error de subestimar a sus rivales (por cierto que su “fracaso” pienso que fue lo más desaprovechado en el “Episodio III” porque era el asunto que podía haber dado argumentalmente mayor carga dramática).
Ahora ya hablando de esta película de “Las guerras clon” creo que es fiel a lo que pretendía Lucas a partir de ahora y se presenta como un entretenimiento, una película de animación, sí, pero ante todo una película de acción y aventuras aunque ambientada en el universo de Star Wars. No hay que buscar en ella mayor profundidad ni una carga dramática que no tiene (para desgracia de los nostálgicos y de muchos otros que buscan algo más en el cine sea del género que sea) y sí una película para entretenerse como también lo es la serie para la que sirve de preámbulo y que seguramente tendrá más tiempo para ahondar en aspectos más interesantes (he visto el primer capítulo y reafirma esta idea mía: magnífico el momento en que Yoda habla con los tres clones que conforman su guardia personal).
Indudablemente es una película que no pasa de la corrección, no es el cine con mayúsculas que sí nos ofrecían las primeras películas de la saga puesto que de alguna manera y en esto sí que estaremos de acuerdo muchos, el nivel ha ido bajando conforme los argumentos han ido perdiendo peso dramático y suspense y la acción ha pasado a ocupar la pista central de las historias, pero tampoco me parece una producción desdeñable como muchos han dicho porque creo que el toparse con algo que no esperaban y no querían les ha “encendido” más de la cuenta. A mí personalmente me chirría toda la parte que tiene que ver con los Hutt (especialmente “apestosito” que para mi gusto es un personaje más irritante que el propio Jar Jar Binks) y en mi apreciación le quita puntos a la película, pero por contra hay momentos realmente impactantes como las acciones de los jedis en batalla (por mucho que nunca me ha gustado demasiado que se hayan convertido en algo así como “superhéroes”) o el arranque con el ataque a los puestos de los cañones de la República. Me encanta casi siempre que salen los clones en acción y remitiría para ello a uno de los episodios de la primera serie de animación que se hizo en dibujo tradicional en el que era protagonista un grupo de élite y que me pareció grandioso (Por cierto y a modo de apunte decir que aquella serie es cronológicamente posterior a esta).
Tampoco me convence demasiado el tipo de animación usada y es uno de los aspectos que más se han criticado de esta producción puesto que se le acusa de falta de profundidad de campo y de que los personajes humanos no terminan de estar del todo conseguidos, pero la verdad es que no hay que buscarle un aspecto realista que nunca ha pretendido conseguir y en la serie de televisión eso no parece un problema. Quizás sea una animación que envejezca mal con el tiempo debido a los avances que se están logrando en este campo, pero sí es cierto que a cambio de las pegas permite que la acción sea trepidante.
En definitivas cuentas que ante lo que estamos es ante el prólogo de lo que muchos pidieron, al comprobar que sólo se aludía a su comienzo en Episodio II y a su final en Episodio III: Las Guerras Clon, desarrolladas por extenso en una serie de más de cien capítulos cuyo comienzo es esta película. Disgustará a los “nostálgicos” y apasionará a las nuevas generaciones, pero entrentendrá en ambos casos a quien se acerque a ella sin demasiados prejuicios y sin esperar algo que nunca prometió ser porque nunca pasó de ser una “película pequeña” dentro del universo de Star Wars. Ese puede que sea su mayor “pecado” aunque en lo que a mí respecta pienso que no por ello está por debajo de muchísimas películas que se hacen en la actualidad sin otro objetivo que entretener y sin mayor carga de profundidad. Si apoyamos al cine de fantasía y acción como una alternativa digna a otro tipo de cine pienso que esta película aunque esté por debajo de sí misma y de la saga a la que pertenece no está por debajo de muchas otras películas cuyo objetivo es el mismo, entretener y hacer caja. Eso sí, a todos nos hubiera gustado un poco más de enjundia argumental porque usar un rapto para conmover a los más pequeños con el “apestosito” no tiene que ser un problema para darle más emoción al relato sino al contrario. ¡¡¡Qué pena tanta contra para tan poco pro!!! Al menos la saga sigue viva para disfrute de muchos y disgusto de otros tantos.